Un estudio sobre 3.000 pares de gemelos británicos de doce años revela que la mitad de los genes que influyen en la lectura también juegan un papel en el rendimiento matemático. Estas capacidades son altamente heredables, pero esto no significa que los padres no puedan hacer nada al respecto si su hijo tiene dificultades de aprendizaje.
Un grupo internacional de investigadores, liderado por la Universidad de Oxford, El University College de Londres y el King’s College de Londres, ha publicado un estudio en la revista Nature Communications que revela que las habilidades matemáticas y de lectura comparten una base genética común, e indican que estas capacidades son altamente heredables.
“Nuestra investigación desvela que los genes marcan diferencias entre las capacidades individuales de alfabetización y aritmética entre los niños. Pero lo que más nos ha sorprendido es que aproximadamente la mitad de estos factores genéticos son las mismas para la alfabetización que para la aritmética” indica a Sinc Robert Plomin, profesor en el Instituto de Psiquiatría del Kings College de Londres.
Los resultados obtenidos señalan que aproximadamente la mitad de los genes que influyen en la lectura también juegan un papel clave en la destreza de cálculo. Y sugieren que tanto el entorno como la genética de un niño contribuyen a la semejanza entre su habilidad lectora y su pericia matemática.
Plomin aclara que aunque existe una fuerte influencia genética, no significa que los padres no puedan hacer nada al respecto si su hijo tiene dificultades de aprendizaje, ya que heredabilidad no implica inmutabilidad.
Referencia bibliográfica
Oliver S.P. Davis, Gavin Band, Matti Pirinen, et al. “The correlation between reading and mathematics ability at age twelve has a substantial genetic component” Nature Communications DOI: 10.1038/ncomms5204.